M谩s de cuatro docenas de murci茅lagos frug铆voros de Jamaica destinados a un laboratorio en Bozeman, Montana, se convertir谩n en parte de un experimento con un objetivo ambicioso: predecir la pr贸xima pandemia mundial.
Los murci茅lagos en todo el mundo son vectores primarios para la transmisi贸n de virus de animales a humanos. Generalmente esos virus son inofensivos para los murci茅lagos, pero pueden ser mortales para los humanos.
Por ejemplo, en China, los murci茅lagos de herradura se citan como una causa probable del brote de covid-19. Y los investigadores creen que la presi贸n ejercida sobre los murci茅lagos por el cambio clim谩tico y la invasi贸n del desarrollo humano han aumentado la frecuencia con la que los virus saltan de estos animales a las personas, causando lo que se conoce como enfermedades zoon贸ticas.
鈥淓stos eventos indirectos son el resultado de una cascada de factores estresantes: el h谩bitat de los murci茅lagos cambia, el clima se vuelve m谩s extremo, los murci茅lagos se trasladan a 谩reas humanas para encontrar comida鈥, dijo Raina Plowright, ecologista de enfermedades y coautora de un art铆culo reciente en la y otro en sobre el papel de los cambios ecol贸gicos en las enfermedades.
Es por eso que Agnieszka Rynda-Apple, inmun贸loga de la Universidad Estatal de Montana (MSU), planea traer murci茅lagos frug铆voros (o de la fruta) de Jamaica a Bozeman este invierno para iniciar una colonia de reproducci贸n y acelerar el trabajo de su laboratorio como parte de un equipo de 70 investigadores en siete pa铆ses.
El grupo, llamado BatOneHealth, fundado por Plowright, espera encontrar formas de predecir d贸nde el p贸ximo virus mortal podr铆a dar el salto de los murci茅lagos a las personas. 鈥淓stamos colaborando para responder a la pregunta de por qu茅 los murci茅lagos son un vector tan fant谩stico鈥, dijo Rynda-Apple.
鈥淓stamos tratando de entender qu茅 es lo que hace que sus sistemas inmunol贸gicos retengan el virus y cu谩l es la situaci贸n en la que lo eliminan鈥, agreg贸.
Para estudiar el papel del estr茅s nutricional, explic贸 que los investigadores crean diferentes dietas para estos mam铆feros, 鈥渓os infectan con el virus de la influenza y luego estudian cu谩nto virus est谩n eliminando, la duraci贸n de la eliminaci贸n viral y su respuesta antiviral”.
Si bien Rynda Apple y sus colegas ya han estado haciendo este tipo de experimentos, la cr铆a de murci茅lagos les permitir谩 ampliar la investigaci贸n. Es un esfuerzo arduo comprender a fondo c贸mo el cambio ambiental contribuye al estr茅s nutricional, y predecir mejor el efecto indirecto.
鈥淪i realmente podemos entender todas las piezas del rompecabezas, eso nos dar谩 herramientas para volver atr谩s y pensar en medidas contra-ecol贸gicas que podemos poner en pr谩ctica para romper el ciclo de los efectos indirectos鈥, dijo Andrew Hoegh, profesor asistente de estad铆sticas en MSU que est谩 creando modelos para posibles escenarios indirectos.
El peque帽o equipo de investigadores de la MSU trabaja con un investigador del Rocky Mountain Laboratories de los Institutos Nacionales de Salud en Hamilton, Montana.
Los art铆culos recientes publicados en Nature y Ecology Letters se centran en el virus Hendra en Australia, que es donde naci贸 Plowright.
Hendra es un virus respiratorio que causa s铆ntomas similares a los de la gripe y se propaga de los murci茅lagos a los caballos, y luego puede transmitirse a las personas que tratan a los caballos. Es mortal, con . De las siete personas que hasta el momento se sabe que contrajeron esta infecci贸n, cuatro murieron.
La pregunta que impuls贸 el trabajo de Plowright es por qu茅 Hendra comenz贸 a aparecer en caballos y personas en la d茅cada de 1990, a pesar de que los murci茅lagos probablemente han albergado al virus por millones de a帽os.
La investigaci贸n demuestra que la raz贸n es el cambio ambiental. Plowright comenz贸 su investigaci贸n sobre murci茅lagos en 2006. En muestras tomadas de murci茅lagos australianos llamados zorros voladores, ella y sus colegas rara vez detectaron el virus.
Despu茅s de que el cicl贸n tropical Larry frente a la costa del Territorio del Norte australiano acabara con la fuente de alimento de los murci茅lagos en 2005-06, cientos de miles de animales simplemente desaparecieron. Sin embargo, encontraron una peque帽a poblaci贸n de murci茅lagos d茅biles y hambrientos cargados con el virus Hendra.
Eso llev贸 a Plowright a centrarse en el estr茅s nutricional como un factor clave en el efecto indirecto. El equipo analiz贸 25 a帽os de datos sobre la p茅rdida de h谩bitat, el derrame y el clima, y descubrieron un v铆nculo entre la p茅rdida de fuentes de alimento causada por el cambio ambiental y las altas cargas virales en murci茅lagos estresados por la comida.
En el a帽o posterior a un patr贸n clim谩tico de , con sus altas temperaturas, que ocurren cada pocos a帽os, muchos 谩rboles de eucalipto no producen las flores con el n茅ctar que necesitan los murci茅lagos. Y la invasi贸n humana de otros h谩bitats, desde las granjas hasta el desarrollo urbano, ha eliminado las fuentes alternativas de alimentos. Entonces, los murci茅lagos tienden a mudarse a 谩reas urbanas con higueras, mangos y otros 谩rboles deficientes y, estresados, propagan los virus.
Cuando los murci茅lagos excretan orina y heces, los caballos las inhalan mientras huelen el suelo. Los investigadores esperan que su trabajo con murci茅lagos infectados con Hendra ilustre un principio universal: c贸mo la destrucci贸n y la alteraci贸n de la naturaleza pueden aumentar la probabilidad de que los pat贸genos mortales pasen de los animales salvajes a los humanos.
Las tres fuentes m谩s probables de contagio son los murci茅lagos, los mam铆feros y los artr贸podos, especialmente las garrapatas. Alrededor del que infectan a los humanos provienen de animales, y alrededor de dos tercios de ellas provienen de animales salvajes.
La idea de que la deforestaci贸n y la invasi贸n humana de las tierras salvajes alimentan las pandemias no es nueva. Por ejemplo, expertos creen que el VIH, que causa el SIDA, infect贸 a los humanos por primera vez cuando la gente com铆a chimpanc茅s en 脕frica central. Un brote en Malasia a fines de 1998 y principios de 1999 del virus Nipah transmitido por murci茅lagos se propag贸 de murci茅lagos a cerdos. Los cerdos lo amplificaron y se propag贸 a los humanos, con un brote que infect贸 a 276 personas, y mat贸 a 106.
Ahora est谩 emergiendo la conexi贸n con el estr茅s provocado por los cambios ambientales.
Una pieza cr铆tica de este complejo rompecabezas es el sistema inmunol贸gico de los murci茅lagos. Los murci茅lagos frug铆voros de Jamaica que vivir谩n en la MSU ayudar谩n a los investigadores a obtener m谩s informaci贸n sobre los efectos del estr茅s nutricional en su carga viral.
Vincent Munster, jefe de la unidad de ecolog铆a de virus de Rocky Mountain Laboratories y miembro de BatOneHealth, tambi茅n est谩 analizando diferentes especies de murci茅lagos para comprender mejor la ecolog铆a del contagio. 鈥淗ay 1,400 especies diferentes de murci茅lagos y hay diferencias muy significativas entre los que albergan coronavirus y los murci茅lagos que albergan el virus del 脡bola鈥, dijo Munster. 鈥淵 murci茅lagos que viven cientos de miles juntos versus murci茅lagos que son relativamente solitarios鈥.
Mientras tanto, Gary Tabor, esposo de Plowright, es presidente del Center for Large Landscape Conservation, una organizaci贸n sin fines de lucro que aplica la ecolog铆a de la investigaci贸n de enfermedades para proteger el h谩bitat de la vida silvestre, en parte, para garantizar que la vida silvestre est茅 adecuadamente alimentada y protegerse contra la propagaci贸n de virus.
鈥淟a fragmentaci贸n del h谩bitat es un problema de salud planetaria que no se est谩 abordando lo suficiente, dado que el mundo contin煤a experimentando niveles sin precedentes de deforestaci贸n鈥, dijo Tabor.
A medida que mejore la capacidad de predecir brotes, otras estrategias se vuelven posibles. Los modelos que pueden predecir d贸nde podr铆a extenderse el virus Hendra podr铆an conducir a la vacunaci贸n de los caballos en esas 谩reas. Otra posible soluci贸n es el conjunto de “contramedidas ecol贸gicas” a las que se refiri贸 Hoegh, como la plantaci贸n a gran escala de eucaliptos en flor para que los murci茅lagos zorros voladores no se vean obligados a buscar n茅ctar en 谩reas desarrolladas.
鈥淓n este momento, el mundo est谩 enfocado en c贸mo podemos detener la pr贸xima pandemia鈥, dijo Plowright. 鈥淒esafortunadamente, preservar o restaurar la naturaleza rara vez es parte de la discusi贸n鈥.
